Buenos detalles
Me gustan los detalles, me gusta el buen detalle. Porque si de equilibrar la balanza hablamos, prefiero que equilibre para arriba. Y en estas épocas modernas donde todo da lo mismo, que nos bancamos todo y que pocos se esfuerzan, me quedo con esos pocos.
Me gustan los buenos detalles, sobre todo los que denotan buena educación, los que se aprenden en casa o se desarrollan con el tiempo y desde la buena actitudy el respeto. Un saludo con ganas, un apretón de manos bien dado, un comentario oportuno y también un silencio que diga todo. Porque parece que nos olvidamos de ciertas maneras que nos embellecen y van por encima de todo, pero que algunos desconocen o se olvidaron. Para ejemplo solo basta con salir a la calle, dar algunos pasos por la vereda, intentar cruzar una calle, viajar en colectivo o ir de compras. No voy a generalizar, pero da la sensación que a nadie le importa nada el otro y ahora parece que la razón ni siquiera la tiene el cliente.
Cambiando la queja por la sugerencia… ¿Y si nos enfocamos en poner de moda las buenas maneras? Comparto con vos algunos consejos que suelo brindarles a mis clientes, porque una buena imagen abarca mucho más que la ropa y los zapatos y ésta debe ser lo mejor acabada posible.
Acostumbrate a saludar, pedir permiso y disculparte. Te vas a sorprender como un buen gesto cambia la situación. También te vas a sorprender de la cantidad de gente que no entiende o no responde, pero no lo hagas para recibir lo mismo, hacelo por vos, para sumar para arriba.
Poné en tu cara una sonrisa. Cómo en el caso anterior, te vas a sorprender como algo tan simple te cambia el panorama. Dicen que una sonrisa es un gran puente de conexión entre las personas, un indicativo de que todo va bien. Un ablandador o transformador de situaciones frías o incomodas.
Caminar correctamente es hacerlo por tu derecha, cediendo tu lugar a niños, ancianos o personas con dificultades. Sé que la parte complicada es caminar sin estar pendiente del celular, aquí se trata más de quién viene atrás que de vos mismo. Tomar la derecha también rige si usas escaleras, incluso las mecánicas. De esa manera dejas libre para que transiten los que están muy apurados.
Charlemos de perfumarse…Es una linda manera de terminar tu conjunto, pero si la fragancia es demasiada invasiva pierde lo agradable, traspasa y se mete en espacios ajenos al igual que el mal olor. Una ducha diaria y un par de splash de fragancia son perfectos y necesarios.
Aquí me voy a explayar porque se trata de un mal hábito que puede dejarte eliminado: la impuntualidad. Tengo amigos que nacieron con ese “don”. Si sos uno de esos que llega tarde a todo, ponete ya mismo en plan de cambio. Adelantá el reloj para tener esos minutos ficticios que juegen a tu favor, levantate antes, dejá de pensar que en poco tiempo podrás lograr tantas actividades y acostúmbrate a que el tiempo es igual de valioso para todos y a nadie le gusta esperar. Si estás llegando tarde a un encuentro, te conviene mandar un mensaje para que el otro espere o siga con sus cosas.
Usa tus redes sociales con criterio porque no todo te suma, no todo es divertido, no todo lo que te pasa es para compartir y aunque duela o caiga molesto, a muy pocos les interesa la vida virtual del otro. Hay cómo una nueva epidemia de mostrarse más desnudo que vestido y de confundir Facebook con Tinder. En lo personal, le escapo a esas dos alternativas, así como a la de opinar de aquello que no sé. Le bajo el pulgar a cualquier situación que genere grietas, peleas o malestares. Para mí las redes son para sumar, para aprender y para compartir desde el respeto y la buena onda.
Hay mucho para hablar del tema, pero no quiero que pase de bueno a denso. Espero me cuentes por mis redes @diazechegaray que consejos pusiste en uso o alguna anécdota al respecto.
Leonardo Díaz Echegaray Coach de Imagen - Experto en Moda Masculina. @diazechegaray